Enfoque Analítico / Desarrollo de soluciones simples

Cuando hablamos de análisis, nos imaginamos un grupo de personas con grandes bases de datos aplicando cálculos masivos y complejos. Sin embargo, el análisis es tan práctico y necesario en cada uno de los entornos de la vida laboral y personal.

En primer lugar, el análisis se basa en el estudio e interpretación de indicadores que permitan dimensionar el impacto de una realidad. Por ejemplo, en el análisis financiero, tenemos los KPI como ejemplos donde, a partir del resumen de valores numéricos, se puede obtener una interpretación más concisa de la realidad financiera de la organización en un momento dado.

Al igual que en las finanzas, el análisis puede estructurarse para distintas situaciones, siempre enfocándose en que el análisis es una herramienta que busca proveer una solución a un problema. Para ello, debe fundamentarse en una visión crítica, tomando distancia y considerando elementos que muchas veces escapan a la simple interpretación.

Un analista de alto nivel busca validar la integridad de los datos, separarlos del todo e interpretarlos individualmente; tomando este punto como un material para generar una gran cantidad de recursos.

Resumir los datos y emitir una conclusión resulta ser el norte del proceso, tomando en cuenta, de igual manera, los aportes en la interpretación de cada individuo, fundamentándose en su conocimiento, generando la diferenciación y mayor impacto en los resultados.

El análisis se construye constantemente, nunca se podrá concluir sobre un punto a través de un único criterio, siempre podremos obtener un perfil distinto, dependiendo del alcance y el impacto que buscamos a través del análisis en cada una de sus facetas.