¿Qué significa ser competente? ¿La competencia se tiene o se adquiere?


EMPLEO

 

Ser competente en el campo profesional consiste en saber resolver problemas y situaciones del trabajo de forma autónoma.

No basta con saber, se precisa movilizar las habilidades, conocimientos y actitudes adquiridas para desempeñar las tareas propias de una profesión.Es como si una persona llevara una mochila en la espalda en dónde va depositando los conceptos, procesos, habilidades, actitudes.Ante una situación determinada, hay quien sabe sacar partido del contenido de su mochila y demuestra ser competente. Otros, teniendo una mochila muy llena, no saben qué usar ni en qué momento hacerlo. Por ejemplo, en referencia a una competencia básica de matemáticas, hay niños que saben sumar, restar, multiplicar y dividir, pero no saben aplicarlo para calcular si les dan bien el cambio cuando van a comprar… no basta con saber, hay que saber hacer.

Para saber si la competencia se tiene o se adquiere podemos observar como algunas personas poseen, de forma intuitiva, una serie de competencias de una profesión determinada. Por ejemplo, hay personas que sin tener estudios de pedagogía son buenos pedagogos. Acompañan a una persona en su proceso de aprendizaje, saben presentar los contenidos, secuenciarlos, motivar. Otros, aún habiendo estudiado en su carrera no saben hacerlo.

Creemos que todas las competencias se pueden aprender, pero cada persona tiene un potencial de competencias determinado que le puede facilitar desarrollar mejor y de manera más rápida unas que otras. Las competencias se aprenden sobre todo en la práctica, en aquellas situaciones que obligan movilizar el conocimiento para tomar decisiones y resolver un problema.

El término competencia nace en el campo laboral y profesional. La transformación del mundo laboral obliga a buscar personas que más allá de sus capacidades sean competentes, sepan resolver problemas de manera autónoma, aprendan de su práctica profesional (es decir pongan en su mochila lo que van adquiriendo en su práctica profesional) y además estén dispuestos a colaborar en su entorno de trabajo.

Desde los inicios de los años 90 ya se empezó a hablar de manera habitual de las competencias profesionales en la organización del currículum de la formación profesional. En la mayoría de países de la OCDE durante esta década construyen su sistema nacional de cualificaciones en base a competencias.

En el año 1996 el informe de la Unesco sobre educación, publicado en España con el título “la Educación encierra un tesoro”, ya ponía las bases de las competencias básicas en el sistema escolar sin nombrarlas. Se proponen cuatro ejes: aprender a conocer, aprender a aplicar, aprender a aprender y aprender a vivir juntos. Era una clara correspondencia a los modelos de competencias profesionales alemanes que hablaban del saber, saber hacer, saber estar y sabe ser.

 

¿Qué importancia tienen las competencias en la empleabilidad de un candidato a un puesto de trabajo? ¿Tienen más peso las competencias transversales o las profesionales?

Las competencias específicas de una profesión son las que sirven de tarjeta de presentación para entrar en el mundo laboral.

El valor añadido de una candidato/a son sus competencias transversales. Que sepa incorporarse a un equipo de trabajo, o liderarlo si fuera necesario, que se implique en su puesto de trabajo, que tenga una visión global de la empresa, que sea generar iniciativas, etc.

Hay quien dice que las competencias específicas sirven para encontrar trabajo, las transversales para conservarlo.

 

 

 

Fuente: Entrevista a Sofia Isus Barado. Directora del Grup de recerca en Competències, Educació, Tecnologia i Societat (COMPETECS) y profesora del Departamento de Pedagogía y Psicología de la Universitat de Lleida