Bernardo Montoya, detenido por el crimen de la profesora de 26 años Laura Luelmo, ha confesado esta mañana el asesinato de la joven durante el interrogatorio de la Unidad Operativo de la Guardia Civil (UCO), según ha informado El Mundo.
El agresor también ha reconocido que intentó violarla. Según ha comentado a la investigación, Laura le preguntó por un supermercado cercano y él le dio una dirección falsa hacia un callejón sin salida. Allí, la agarró y golpeó la cabeza de la joven contra el maletero de su coche.
Con Laura inconsciente, la trasladó al lugar donde fue encontrada e intentó agredirla sexualmente, aunque asegura que no lo consiguió. Sin embargo, la autopsia ha revelado que la víctima sí que fue violada.
Montoya, de 50 años, había cumplido dos condenas, la primera por matar a una anciana de 82 años en 1995 de varias puñaladas y la segunda por dos robos con violencia. Estuvo 17 años en la cárcel hasta hace dos meses que salió en libertad. Al parecer, la joven había llegado a temer al hombre, que la intimidaba y la miraba desde la puerta de su casa.
Laura Luelmo murió de un golpe en la cabeza, según la autopsia
Laura Luelmo murió por un golpe en la cabeza. La autopsia practicada al cuerpo de la joven ha revelado que la causa de la muerte fue una contusión en la cabeza con un objeto contundente.
Sánchez avanza nuevas medidas para garantizar la seguridad de las mujeres
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado, tras el asesinato de Laura Luelmo, que el Ejecutivo aprobará nuevas medidas para garantizar la seguridad de las mujeres en defensa de sus libertades.
Sánchez ha avanzado la aprobación de nuevas medidas en este ámbito ante el pleno del Congreso después de que el líder del PP, Pablo Casado, aprovechara una pregunta sobre Cataluña en la sesión de control para expresar su solidaridad con la familia de Luelmo y pedir que no se derogue la prisión permanente revisable.