Del Bombé a Estilo: Viaje a las discotecas que marcaron la juventud de los ovetenses

Cristina Centeno
Cristina Centeno REDACCIÓN

LA VOZ DE OVIEDO

Interior de la discoteca Estilo, un clásico de la noche de Oviedo, que se traslada a otro local
Interior de la discoteca Estilo, un clásico de la noche de Oviedo, que se traslada a otro local ESPACIO ESTILO

Mucho ha cambiado el ocio nocturno desde la década de los 70 hasta la actualidad. Los lectores de La Voz de Asturias recuerdan sus locales favoritos y los momentos vividos en todos ellos

10 may 2023 . Actualizado a las 09:37 h.

La Real se ha coronado como «gran templo» de la noche ovetense entre los lectores de La Voz de Asturias, pero son muchas más las discotecas que guardan en la memoria quienes han respondido a nuestro formulario para recordar sus grandes momentos de juventud. Cada década tiene sus nombres y el ocio nocturno ha evolucionado con los años dejando atrás parte de aquellos locales.

A comienzos de los 70 se inauguró Aristos, que en aquel momento era la que «tenía el mejor ambiente», tal y como recuerda Pilar, una ovetense que la elige como su discoteca favorita en Oviedo. Era una sala «pequeña y familiar», en la que clientes y personal tenían una relación estrecha, rememora Carmen. «Su ambiente y su música» mantienen vivo este local de la calle Cervantes en la memoria de quienes lo disfrutaron. Había sesiones de tarde los fines de semana, recuerdan otros lectores, quienes evocan los «lentos» que se bailaban en pareja en la pista central. 

Donde hasta hace poco estuvo Estilo se situaba Brujas, otro símbolo para las generaciones que empezaron a salir desde finales de aquella década. Juan José González, de Querúas, recuerda que hubo tiempos en los que iba «a diario, menos los lunes que cerraba». Por su parte, Juan recuerda la pista elevable y entre sus mejores recuerdos está la actuación de Antonio Machín: «Iba a mediados de los 70, con compañeros de Galerías Preciados», rememora. «Era la mejor, cuántos recuerdos», evoca Antonio sobre esta discoteca. Para Rosa María fue su «primera discoteca» y Cándida asegura haber vivido «tiempos maravillosos» allí. 

En el mismo local de Pumarín se ubicó después Estilo, trasladada recientemente a una ubicación cercana. También es para muchos la favorita de entre todas las discotecas de Oviedo. Algunos de sus clientes habituales recuerdan a La Voz de Asturias las orquestas y la «música en directo», seña de identidad de este espacio por el que han pasado conocidos grupos a lo largo de los años. «Mi recuerdo es estar toda la noche bailando», rememora Alberto.

También hubo una generación que recuerda bailar al ritmo de la música del momento en los bajos del hotel Reconquista, donde se ubicaba El Bombé. «Era un ambiente muy agradable de gente conocida de Oviedo», asegura Francisco, recordando a alguno de los personajes de aquella sala como Abdul, el portero «de toda la vida». También Conchi guarda «muchos recuerdos» de esta discoteca, que contaba con un «ambiente fenomenal y familiar» y donde fue «muy feliz». 

En las décadas de los 70 y los 80 también tuvo fama el Triqui-Traque, donde «ponían música disco muy de moda para bailar suelto», recuerda María. «Qué días más felices, sin tanto como ahora pero mucho mejor», evoca Manuela. Carillón, Canary, Circolo, Coker o el Green son otras de las discotecas ya cerradas que los ovetenses recuerdan de su juventud. También Escena, nombre del actual Tribeca en la década de los 80. «Era muy moderna, traían música de importación y los disyoqueis eran muy buenos», cuenta Tonia mientras recuerda las sesiones de tarde de los domingos como sus «mejores momentos» en este local. 

También hay lectores que guardan en su memoria Express, Factory o Funky Room, que tenía «música diferente al resto». Coker, Maki, Story o Albert Hall —en el mismo espacio de la calle Cervantes en el que después abrió La Real— son otros de los nombres propios de las noches ovetenses de antaño. Enrique recuerda Stravaganza como la primera discoteca a la que fue «solo» con sus amigos, mientras Julio apuesta por Studio Oka: «Fue la primera discoteca que pisé y eso no se olvida nunca, pasé muy buenas tardes allí con los amigos, recuerdo un pincha que se llamaba Manolo y que hacía concursos muy divertidos». También Ángeles tiene «bonitos recuerdos» de esta sala y Jaime no se olvida de «los bailes lentos». 

Derribo de la emblemática discoteca Whippoorwill, que abrió en los años 80
Derribo de la emblemática discoteca Whippoorwill, que abrió en los años 80

En el mismo local de la calle Matemático Pedrayes, zona en la que se concentraron varias discotecas hace décadas, estuvo primero Vanitas Vanitatis y, después, Whippoorwill. Esos dos nombres también están en el recuerdo de los lectores de La Voz de Asturias. José Gil recuerda la primera etapa por «la música y el ambiente» y añade: «Allí conocí a mi primer amor». También Vanitas era «la moda» cuando empezó a salir Cristina, por lo que para ella esta discoteca fue «inolvidable». 

Ya con el nombre de Whippoorwill, son muchas las historias que allí se guardan. «Ahí pasé toda mi juventud y me enamoré, muy bellos recuerdos que perduran en mi mente para siempre», cuenta Ana. «Nos encantaba la música y el ambiente, era música maravillosa Nacha Pop, Mecano, Los Secretos… salíamos viernes y sábado y allí conocí a mi esposo en el año 1990, nos casamos en el 2001 y aún seguimos juntos en la actualidad y con dos maravillosas niñas», celebra.

Son muchas las historias que los ovetenses tienen guardadas en su memoria de aquellas discotecas que marcaron la vida de decenas de generaciones y darían «para escribir una enciclopedia».